La capital de China, fue envuelta de una tormenta de arena y de niebla contaminante marrón en la mañana del lunes.
El Gobierno declaró alerta amarilla y la población debió usar protección para cubrirse del poco aire fresco que se extenderá hasta horarios de la tarde del martes. “Esta es la tormenta de arena más intensa que ha visto nuestro país en 10 años, y la que cubre la extensión más amplia” – expresaron desde el centro de monitoreo ambiental.