El Gobierno nacional diagramó un fuerte operativo de Seguridad para evitar que los gremios estatales faciliten el ingreso de algunos de los más de 11 mil empleados despedidos hagan «ingresos masivos y simultáneos» a edificios públicos.
Entre las fuerzas de seguridad de Nación y la Ciudad de Buenos Aires intentarán impedirlo.
ATE encabeza hoy un paro de 24 horas en respuesta a la iniciativa del Gobierno de no renovar 15 mil contratos en el sector público nacional que vencieron el 31 de marzo y por lo cual trabajadores recibieron telegramas con el aviso.
En ese marco, llamó a un «molinetazo» para que lo cesanteados ingresen a las oficinas en las que trabajaban, como protesta por los 11.000 contratos caídos.