La Canasta Básica de los Jubilados escaló en los últimos 12 meses un 239%, alcanzando un valor de $685.041, de acuerdo a los cálculos de la Defensoría de la Tercera Edad. En relación a la última medición elaborada en octubre del año pasado, el aumento trepó al 118,73%.
El impacto de la inflación y el ajuste sobre los haberes golpean de lleno en el poder adquisitivo de los jubilados, que cada vez más sufren la brecha entre los gastos mensuales que deben afrontar y los ingresos que perciben.
Los $685.041 que actualmente se estiman que son necesarios para abonar los costos básicos que tienen los adultos mayores están muy lejos de la jubilación mínima, que se ubica en $134.445 y que alcanza los $204.445 en caso de incluir el bono de $70.000. En tanto, el haber medio de los jubilados que no recurrieron a las moratorias es de $299.407.
Por el lado de la Pensión para Adultos Mayor (PUAM), el programa dirigido a personas mayores de 65 años que no reúnen los 30 años de aportes requeridos para tramitar la jubilación ordinaria, actualmente está en $107.556,24. Mientras que con los $70.000 del bono de refuerzo, el monto a cobrar escala a un total de $177.557.